Hansel Camacho, el compositor, el actor de TV, pero, sobre todo, el cantante de salsa nacido en el barrio La Yesquita (Quibdó, Chocó); de cuna humilde, heredó de sus padres el talento musical y de la vida, el don de la composición.
El mundo salsero ha tenido el placer de disfrutar las canciones y el show en tarima de Hansel Camacho Orquesta y su consolidación como compositor, cantante y actor de televisión en producciones como: Azúcar, Señora Isabel, La Potra Zaina, Oye Bonita, La Sucursal del Cielo, La Hija del Mariachi, entre otras; y películas colombianas como: Perro Come Perro y El Carro; además de la composición de más de 150 temas musicales.
El fútbol fue su primer amor, la guitarra su “máquina de los sueños” y el Chocó su mayor adoración. Aprendió que para crear su realidad más bonita y trascendental tenía que entregarse entero y abandonar aquella comodidad pasajera auto impuesta, por eso viajó a Bogotá, acompañado de su vieja guitarra y un cuaderno para escribir y componer sus sueños.
Fue su vieja guitarra, aquella que le susurraba al oído sus canciones, aquella rebelde que siempre confió en él; la que en noches de elucubraciones y dudas se dejaba acariciar, recordándole que la recompensa estaba cerca, que solo había que
rasgar el velo de la duda y transformarla en convicción, que había que arriesgarse ante la incertidumbre para dar el salto de fe, ya que el universo se encargaría del resto. Y así fue. la vieja guitarra le regaló su más grande triunfo de la vida, lograr trascender y dejar con su música una huella imborrable en el corazón de sus seguidores.
Esa vieja guitarra y ese cuaderno fueron cómplices de su primera certeza artística, aquellos que le procuraron ser el ganador del Concurso Componga, Cante y Gane, por allá por el año 1982.
Su primera oportunidad artística fue como cantante en el Grupo Camagüey. Su primera interpretación musical en estudio fue “La Despedida” en 1988. Para él, fue una experiencia muy excitante que le produjo muchos nervios, “era mi primera vez”, recuerda. Luego vinieron sus primeros dos éxitos musicales “Pretenciosa” y “Duda”, con el Grupo Changó de Bogotá, a finales del mismo año.
Las cosas empezaban a funcionar, “la máquina de sueños” empezaba a mostrar su recompensa. Es así como en el año 1989, recibió su primera oportunidad en el mundo de la televisión colombiana, la famosa serie Azúcar, le permitió mostrar todo ese talento que avizoraba en su juventud; gracias a ello, en 1990, gana dos galardones importantes para el mundo del espectáculo en el país: el Premio Nacional de Televisión Simón Bolívar en las categorías Actor
Revelación y Mejor Música de Seriado por la interpretación del “Viejo Lucio”, personaje diseñado originalmente para durar poco en la serie, pero gracias a su talento, convenció a Carlos Mayolo (director de la serie) para volverlo habitual de la producción. Durante los dos años que estuvo el melodrama al aire con su personaje establecido en la serie, explotó su faceta de cantante y compositor, la cual le regala su segundo Premio Simón Bolívar en la categoría Mejor Música de Seriado por componer toda la música de la serie (36 temas originales).
¡Cómo olvidar a Lucio protestando a sus patrones al ritmo de la Salsa, o Ignacio Solaz enamorando a Marianita al sonido melódico de la vieja guitarra! Con estas dos estatuillas su carrera de músico, compositor y actor se catapultó con una imagen consolidada en la farándula colombiana.